Nube de historias

Hacia mediados de los 70 vivía en un barrio obrero de sur de Madrid, pegado aun par de grandes fábricas, una de las cuales se puso en huelga, no tengo muy claro con motivo de qué, es mas no tengo claro si Franco había muerto o nó. El caso es que la huelga se alargaba y la gente humilde que habitaba ese barrio se empezó a alterar un tanto. Yo vivía en un gran patio con 6 escaleras y un montón de vecinos, muchos de los cuales trabajaban en esta empresa. Todos los dias habia un montón de personas asomadas al portal que daba a la calle, mientras unos entraban y salian, comentando las novedades de la huelga. Los niños nos limitabamos a pasar los días jugando en el patio, como siempre.
De pronto un buen día en la calle se oía bastante mas jaleo que normalmente y los que estaban en el portal mirando estaban mas nerviosos que de costumbre, debía de hacer casi 15 días de huelga, de vez en cuando entraban corriendo al portal para, momentos despues, volver a asomarse.
Una de estas veces entraron corriendo al patio seguidos de unos señores vestidos de gris y con porras dando mamporros a todo lo que se movía, años después supe que eran los grises y eran policías, los mayores pasaron corriendo entre los niños, algún policía bajo los 7 escalones (eran 7 y era una proeza de niños saltarlos todos de una vez) rodando, los demás seguían corriendo detrás de los hombres, al lado mió dos policias aporreaban a un pobre hombre que intentaba defenderse de los palos. Consigo esquivarlos y decido irme al fondo del patio, a las escaleras mas alejadas de la entrada, mientras veo una maceta caer a escasos centímetros de uno de los policia, todo bullicio, jaleo y un montón de insultos para los grises que siguen a los suyo detrás de los hombres repartiendo palos y poniendo esposas. Esquivo a un policía y un hombre arreandose sin contemplaciones y por fin consigo llegar a la escalera y nada mas empezar a subir me encuentro a mi hermana intentando subir la escalera, muy asustada. Por aquella época los hombres eran hombres y los proyectos de hombres eramos proyectos pero eramos hombre. Me hago cargo de la situación y después de calmar a mi hermana decido que lo mejor es subir las escaleras hasta el final y esconderse allí hasta que pase el jaleo. Subimos al cuarto piso y consigo asomarme a la ventana de la escalera y veo el patio como una batalla campal. Un montón de policías llevandose gente y un montón de personas asustadas vociferando e imprecando a los policias. Decidimos estarnos un ratito quietos allí y un rato después viendo que el ruido había bajado vuelvo a asomarme y ya no veo nadie de fuera, veo a mi madre llamandonos. Cojo a mi hermana y bajamos la escalera lo mas rápido posible y corriendo vamos a reunirnos con nuestra madre que nos recibe con un enorme abrazo.
El resultado de esta batalla campal fueron varios policía heridos y 5 personas de las que vivian en el patio detenidas, por suerte esa misma noche durmieron todas en sus casas